Los lugares de culto que alberga Verona se encuentran entre las joyas más preciosas de la ciudad, tanto por su aspecto histórico como por su valor arquitectónico.
Algunos de los edificios religiosos que se pueden visitar hoy en día son, de hecho, testimonios de las formas de construcción que se han difundido en Verona a lo largo de los siglos.
Ejemplos de ello son la arquitectura románica de la Basílica de San Zenón y la de una joya quizás menos famosa, pero igualmente fascinante, la iglesia de San Lorenzo.
Su guía les acompañará a descubrir los lugares de culto de Verona, permitiéndoles descubrir elementos ricos de significado, como la fachada de San Zenón, que cuenta la Biblia a través de imágenes de piedra.
Además podrán descubrir cómo vivían las comunidades religiosas en el pasado, con el encanto de los claustros y la atmósfera de las iglesias veronesas, como el interior de San Lorenzo, que, gracias a los armoniosos juegos de llenos y vacíos y a la delicada luz que se filtra a través de las ventanas monóforas, genera una atmósfera íntima y acogedora.